Description
Desde su gestación como período histórico, la Edad Media se convirtió quizás en la época que más prejuicios,
simplificaciones y generalizaciones ha merecido. Incluso hoy día, cada vez que se utiliza el adjetivo
medieval para calificar una acción o actitud, se hace siempre con una connotación claramente despectiva: lo
medieval es sinónimo de incultura, irreflexión, barbarie y atraso. No en vano, la expresión ya no estamos en la Edad Media sigue utilizándose para expresar indignación ante un hecho intolerable e indigno de una época,
la nuestra, en principio más avanzada y brillante.
Han sido muchos los historiadores que han defendido al Medievo de esta injusta apreciación general, haciendo
hincapié en las numerosas luces que caracterizaron dicha época, desde las magníficas catedrales que aún presiden muchas ciudades europeas hasta la creación de la Universidad. Sin embargo, poco se ha escrito sobre el origen de esa concepción despectiva mil años de la historia: por qué