Description
Encuadernación: Rústica
Stevenson empezó a escribir La Isla del Tesoro en unas vacaciones estivales al norte de Escocia, en 1881, a petición de un jovencito de 13 años llamado Lloyd Osborne. Es bien conocido que escribió la novela al tiempo que la ideaba en su cabeza, casi como si de un juego se tratara y a partir de un mapa imaginario que él mismo dibujó de la isla y a la que fue añadiendo los más diversos paisajes: montes, cabos, bahías, acantilados... A la tarea de confeccionar esta novela tan itinerante, pronto se unieron los padres, además de otros familiares y amigos: la novela se había convertido en el pasatiempo familiar de las vacaciones.
Sin duda esta particular y espontánea planificación de la obra contribuyó a darle ese ritmo frenético y esa frescura que han hecho de la isla del tesoro un auténtico canto a la libertad, convirtiéndola en lectura universal obligada de la que ningún lector, que quiera presumir de serlo, ha de renunciar al menos media docena de veces a lo